Título original: The book thief
Autor: Markus Zusak
Editorial: Debolsillo
Saga: Autoconclusivo
Saga: Autoconclusivo
Páginas: 531
Precio: 9,95€
ISBN: 978-84-9908-807-5
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Érase una vez un pueblo donde las noches eran largas y la muerte contaba su propia historia. En el pueblo vivía una niña que quería leer, un hombre que tocaba el acordeón y un joven judío que escribía bellos cuentos para escapar del horror de la guerra. Al cabo de un tiempo, la niña se convirtió en una ladrona que robaba libros y regalaba palabras. Con estas palabras escribió una historia hermosa y cruel que ahora ya es una novela inolvidable.
Como protagonista de esta preciosa historia tenemos a Liesel Meminger, una chica de unos 12 años (no me hagáis mucho caso), que pasa de vivir con su madre y su hermano pequeño, a hacerlo con su nueva familia adoptiva, Rosa y Hans Hubermann, en la ciudad de Munich, Alemania. El libro está ambientado a principios de la Segunda Guerra Mundial, para que tengáis en cuenta la situación de Alemania en ese momento.
Es una niña un poco reservada, pero tiene bien claro lo que quiere y cómo conseguirlo. Al principio, se limita a acatar las ordenes de su mandona madre, Rosa, y a intentar sobrevivir, echando de menos a su madre (la de verdad) y a su hermano. Pero, cuando ya va pasando más tiempo en esa casa, se da cuenta de que tampoco está tan mal.
Hans Hubermann es un hombre modesto, amable, y muy inteligente. "El único en su zona que trabajaría a cambio de medio cigarrillo" :'). Sabe qué decir y qué hacer en cada momento, dependiendo de la persona con la que esté. Le amé mucho, y bueno, sencillamente, me encantó.
Rudy Steiner es un chiquillo que vive en la casa de al lado, del que se hace amigo desde el primer día de su estancia allí. Es el niño más adorable que he encontrado hasta ahora. Está enamorado de Liesel, pero es un amor raro, porque ella también le quiere, pero no de la misma manera. Aunque tampoco se lo plantea mucho durante el libro, al final se da cuenta. Se dan cuenta. Ambos.
Rosa Hubermann, aunque parece de hierro, en el fondo, tiene un corazoncillo muy falto de amor. Para mí, es un personaje tan increíble como Hans o Rudy. Sufría mucho con ella, y con los pensamientos que se relataban suyos. Amor infinito a Rosa <3.
Max Vandenburg es el joven judío que se esconde con ellos. Liesel y él se hacen muy amigos, a pesar de la diferencia de edad. Y, como él no puede salir de casa, ella se dedica a robar periódicos, libros y algunas cosas más, para él. Le cogí mucho cariño a su ingenio, a su imaginación y a su sentido del humor, sobretodo (teniendo en cuenta la situación en la que vivía, tiene mucho mérito).
Este libro me ha encantado demasiado, y yo creo que ha sido porque el narrador es la propia muerte (podéis imaginar cómo acaba la historia). Me resultó muy curioso ver la vida de estos personajes desde su punto de vista.
Y otro detalle del libro que me gustó fueron como pequeños comentarios que estaban añadidos en medio de la narración, así:
El libro está dividido en un prólogo, diez partes (con ocho capítulos cada uno) y un epílogo.
No es pesado de leer, al contrario, es muy entretenido, pero es lento. Las páginas son finas y la letra, pequeña.
El estilo con el que Markus Zusak ha escrito esta novela (no he leído ninguna más suya) me ha resultado increíble. Me ha sorprendido la originalidad de la muerte como narradora. Pero, también, me ha encantado cómo es capaz de hacer que comprendas a los personajes, de que les conozcas, y de que simpatices con ellos narrándolo desde un punto de vista tan lejano, ¿no?
¿Vosotros ya lo habéis leído? ¿Qué os pareció?
Si no, ¿tenéis ganas de leerlo? (deberíais).
Contadme qué os ha parecido la reseña.
Hasta pronto,
Eva.
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